domingo, 17 de junio de 2012

AL VIENTO





El momento que presenta el artista es la llegada de la diosa Afrodita, tras su nacimiento, a la isla de Citera, empujada por el viento como describe Homero, quien sirvió de fuente literaria para la obra de Botticelli. Venus (Afrodita) aparece en el centro de la composición sobre una enorme concha; sus largos cabellos rubios cubren sus partes íntimas mientras que con su brazo derecho trata de taparse el pecho, repitiendo una postura típica en las estatuas romanas de las Venus Púdicas. La figura blanquecina se acompaña de Céfiro, el dios del viento, junto a Aura, la diosa de la brisa, enlazados ambos personajes en un estrecho abrazo. En la zona terrestre encontramos a una de las Horas, las diosas de las estaciones, en concreto de la primavera, ya que lleva su manto decorado con motivos florales. La Hora espera a la diosa para arroparla con un manto también floreado; las rosas caen junto a Venus ya que la tradición dice que surgieron con ella.


 El odre de los vientos:
VULCANO Y EOLO
(Piero di Cosimo -pintor renacentista italiano-)
El dios del viento aparece representado en la esquina inferior izquierda sujetando dos odres.


Peter Paul Rubens  (Eolo)


Habitaba en la región central de la Eólida, región de desvío entre el Mar Negro y el Mar Egeo,donde gobernaba los Vientos con absoluto dominio, pues las divinidades le habían concedido la facultad de excitarlos o apaciguarlos a su voluntad.
Considerado como dios, y como rey o señor de los Vientos, se le representa empuñando un cetro, símbolo de su autoridad, y a su lado se agitan los Vientos, inquietos y turbulentos estremeciéndose u oscilando.
Dentro de la cultura grecorromana, los griegos fueron los poetas y los romanos los pragmáticos. El gran poeta Homero, con su obra La Odisea, donde refiere la azarosa vida de Ulises, dio una explicación poética al origen de los vientos mediante una ingeniosa leyenda.

El dios Eolo aparece por mi primera vez en la Odisea de Homero cuando Ulises, en el curso de sus viajes, abordó la isla de Eolia en la que Eolo le recibió cordialmente entregándole a su partida un valioso presente, un odre de piel de carnero cerrado con una argolla de plata en el que estaban encerrados todos los vientos menos uno, un viento favorable, el que debía empujar a su nave para que pudiese regresar a Ítaca, con la advertencia de que nunca lo abriese, pues se podían desencadenar violentas tempestades al dar salida a todos los vientos a la vez. Sólo en casos muy precisos y de manera muy cuidadosa podría luchar contra las calmas, pero siempre con mucho riesgo.
Pero durante el viaje de vuelta, a los diez días de la partida y mientras Ulises dormía, la tripulación, en medio de la noche, creyendo que el odre contenía oro y plata, lo abrieron imprudentemente. Los vientos escaparon entonces con tal violencia, que desencadenaron una tempestad empujando la nave de nuevo hasta la costa de Eolia. Pero esta vez, Eolo, creyendo que la imprudencia de los tripulantes había sido una traición, entró en cólera contra Ulises y sus compañeros, y les expulsó de la isla, devolviéndolos errantes al mar.
Cada uno de los Vientos con los que es representado Eolo es un dios. Estos son los vientos principales y los menores.



Vientos Principales (Anemoi):
 *Viento del Norte: Bóreas (Aquilón en la mitología romana). Trae el invierno. Es representado fuerte y barbudo.

*Viento del Sur: Noto (Austro en la mitología romana). Trae las tormentas finales de verano y otoño.

*Viento del Este: Euro (Vulturno en la mitología romana). Trae calor y lluvia.
 *Viento del Oeste: Céfiro (Favonio en la mitología romana). Es mensajero de la primavera. Protege las flores y las plantas.


Vientos Menores (Anemoi Thuellai o "vientos de tempestad") :

Viento del Noreste:
 Cecias (Caecius en la mitología romana). Arrojar el granizo.

Viento del Sureste:
Apeliotes (Argestes en la mitología romana). Sopla el viento que hace madurar las frutas y el trigo.
Viento del Noroeste:
 Coro (Caurus o Corus en la mitología romana). Provoca el inicio del invierno.

Viento del Suroeste:
 Libis (Afer Ventus o Africus en la mitología romana). Su función no está muy definida.





Dioses del viento en otras mitologías:

 Mitología azteca: Quetzalcóalt, dios del viento o su personificación Ehécatl.
 Mitología hinduista: Vayu, que significa en sánscrito "el que sopla"
.
 Mitología japonesa: Fujin, dios del viento y uno de los más antiguos de la creación.

 Mitología nórdica: Njord, dios del mar y de los vientos y principal de los Vanir (dioses de la fertilidad, el mar y la prosperidad).

 Mitología celta (druida): Ketk, se le representa soplando para destrozar las ramas de los árboles.






SAILING
CHRISTOPHER CROSS






El VIENTO





El quemador del globo aerostático calienta el aire que se acumula en su interior,
como el aire caliente es más ligero que el aire frío, 
 el globo asciende.

Algo parecido sucede con el viento.

 Tiene una procedencia directa de la energía solar.El calentamiento desigual de la superficie de la Tierra, produce zonas de altas y bajas presiones, este desequilibrio provoca desplazamientos de aire que rodea la Tierra, dando lugar a viento.
-Masas de aire se desplazan por la troposfera.
-El Sol calienta la superficie de la Tierra.
-El aire en contacto con ella también se calienta y asciende.
-Entonces, masas de aire más frío, procedentes de otros lugares, pasan a ocupar el espacio del aire caliente, y de esa manera se produce el viento.

Además, en verano y durante el día, el sol calienta el aire sobre la tierra firme más que el que está sobre el mar. El aire continental se expande y eleva, disminuyendo así la presión sobre el terreno, provocando que el viento sople desde el mar hacia las costas. Lo contrario ocurre durante la noche, especialmente en invierno, donde la tierra se enfría más rápidamente que el mar.
Los vientos permiten las dispersiones de frutos y semillas,
migraciones de animales que siguen las corrientes de aire de la atmósfera;
al empujar las nubes hacia el interior de los continentes,
hace posible las lluvias en regiones que, de lo contrario,
permanecerían sin vegetación por la falta de agua.



El viento está siempre presente en la superficie de la tierra. Es caprichoso, nunca se sabe con antelación cómo va a soplar, pero aún así fue el que permitió a los grandes navegantes de los siglos XV y XVI dar la vuelta al mundo.

Existe una zona en el océano Atlántico, a unos 30º norte y sur del Ecuador, que los marinos de todo el mundo conocen desde hace siglos como la “Latitud de los Caballos”. El origen del nombre se remonta a los tiempos de los primeros viajes al Nuevo Mundo, cuando los barcos que cruzaban el Atlántico se topaban con una zona donde el viento dejaba de soplar súbitamente. De pronto, las tripulaciones se adentraban en una balsa en la que permanecían varadas durante días, azotadas por un calor y una sequedad insoportables. Cuando la situación empezaba a ser desesperada, los marinos se veían obligados a aligerar el peso del barco para aprovechar el más ligero viento y escapar de aquella zona muerta. Entonces arrojaban por la borda todos lo enseres prescindibles, ya fueran muebles, mercancías o los propios cañones.
A menudo, después de días y días perdidos en la nada, la situación llegaba a ser tan terrorífica que no tenían más remedio que deshacerse de los caballos.




Características del viento:

ANEMÓMETRO  
*Velocidad 
o fuerza
                                                                            **Duración
***Dirección


                                                            VELETA


El viento produce energía porque está siempre en movimiento. Se estima que la energía contenida en los vientos es aproximadamente el 2% del total de la energía solar que alcanza la tierra. El contenido energético del viento depende de su velocidad. Cerca del suelo, la velocidad es baja, aumentando rápidamente con la altura. Cuanto más accidentada sea la superficie del terreno, más frenará ésta al viento. Es por ello que sopla con menos velocidad en las depresiones terrestres y más sobre las colinas. No obstante, el viento sopla con más fuerza sobre el mar que en la tierra.
El instrumento que mide la velocidad del viento, es el anemómetro, que generalmente esta formado por un molinete de tres brazos, separado por ángulos de 120º que se mueve alrededor de un eje vertical. Los brazos giran con el viento y accionan un contador que indica en base al número de revoluciones, la velocidad del viento incidente.
La velocidad del viento se mide preferentemente en náutica en nudos y mediante la escala Beaufort: Esta es una escala numérica utilizada en meteorología que describe la velocidad del viento, asignándole números que van del 0 (calma) al 12 (huracán). Fue ideada por el Almirante Beaufort en el siglo XIX.
Los vientos son nombrados en relación con las direcciones en las que soplan. Así se habla de vientos del Oeste, vientos del Este, vientos del Nordeste, etc.

  
VIENTO&LLUVIA



Lluvias ciclónicas o de frente:
se producen cuando chocan dos masas de aire con distinta temperatura, originan chubascos y lloviznas.

Lluvias de convección:
cuando se calienta la parte inferior de una masa de aire provoca que se eleve, por lo que se enfría y da lugar a lluvias abundantes.

Lluvias de relieve u orográficas:
cuando una masa de aire tropieza con una montaña, asciende para evitarla, y se enfría, lo que provoca lluvias en la vertiente de cara a viento, esa zona donde llueve se llama barlovento, y en la parte donde no cae la lluvia, recibe le nombre de sotavento.



TIPOS DE VIENTOS


El viento, cuando sopla con fuerza, recibe distintos nombres, según las diferentes áreas del mundo: ciclones, huracanes, tornados, etc.
Cuando el viento supera los 119 km por hora se llama huracán. La palabra huracán viene del nombre del dios de la tormenta del Oeste en la India. En el océano Pacífico estas tormentas se llamaban tifones y en Australia son conocidas como Willy Willies.El tornado es un violento embudo giratorio de nubes que se extiende a nivel del suelo. Son muy frecuentes en Norteamérica. Los vientos pueden girar incluso a 380 km por hora, más rápido que ningún otro viento de la tierra.Todos los distintos movimientos de aire que se producen en la Tierra, toman como referencia las áreas en que se divide el globo: dos áreas polares cubiertas por vientos polares del Este, dos franjas de los caballos donde se producen los vientos del Oeste y dos zonas de vientos alisios, que producen los vientos alisios del Nordeste y Sudeste.
Teniendo en cuenta esto, los vientos se clasifican en cuatro tipos:
 Vientos globales: son las líneas generales de movimiento del viento en el mundo, ya que se generan por la diferencia de calor en las grandes masas de la tierra y el agua.
Vientos permanentes: como los alisios, que soplan siempre desde los trópicos al ecuador.
Vientos estacionales: las estaciones se forman por el giro de la tierra según se acerca al sol. Las estaciones ocasionan diferencias anuales en los sistemas meteorológicos en el mundo, ya que tanto la tierra como el agua se calientan a distintos niveles a lo largo del año. El monzón es un viento estacional cargado de lluvia, en verano sopla desde el océano Índico hacia el continente asiático y en invierno al contrario.
Vientos locales:  soplan de manera variable, como el cierzo en Aragón, el levante en alguna zona de Andalucía o la tramontana en Cataluña. Sólo se siente en una zona porque la forma de la tierra o su situación con respecto a una masa de agua genera un movimiento de aire específico.


El ábrego es un viento que tiene mala fama en toda la región Cantábrica, ya que suele estar asociado a catarros, cefaleas y estados depresivos. Además suele traer consigo la propagación de incendios por su baja humedad relativa del aire y la ausencia de precipitaciones. Y es que en esta zona la surada, como también se conoce, es ya un viento fuerte y seco motivado por el llamado efecto Foehn.



En la costa cántabra, el ábrego recibe nombres como viento sur, castellano (procedente de Castilla y por tanto del sur), campurriano (procedente de la comarca cántabra de Campoo-Los Valles) o aire de arriba (de La Montaña, la parte más alta de la comunidad). Si sopla demasiado caliente se refieren a él como “abriguna”, mientras que una abrilada sería el período de varios días bajo ese régimen de vientos.




Vientos giratorios: Suelen ser los más dramáticos de todos los movimientos de aire. Tienen distintas formas y tamaños que van desde el destructivo huracán al más pequeño remolino de polvo.





LA PRESIÓN ATMOSFÉRICA Y EL VIENTO

La dirección del viento depende de la distribución y evolución de los centros isobáricos; se desplaza de los centros de alta presión (anticiclones) y su fuerza es tanto mayor cuanto mayor es el gradiente de presiones.
La determinación de la dirección y velocidad del viento se realiza a partir del estudio de la distribución de la presión atmosférica en la geografía terrestre, es decir a partir de los mapas isobáricos, donde existen dos principios generales:
-El viento va siempre desde los anticiclones a las borrascas.
-Su velocidad se calcula en función de los juntas o separadas que estén las isobaras en el mapa. Cuanto más juntas estén las isobaras, más fuerza tendrá el viento y cuanto más separadas, menos.

El aire, como cualquier otro elemento, pesa. El peso o fuerza que ejerce el aire sobre la superficie terrestre se denonima presión atmosférica.

La presión atmosférica depende de la altitud (a mayor altura menor presión) y de la temperatura del aire.
  • El aire cálido es un aire poco denso y que pesa poco. Por eso tiende a ascender y da lugar a un área de bajas presiones que suele denominarse depresión o borrasca.

El aire caliente, al subir, arrastra vapor de agua, que al remontarse, se enfría, se condensa y forma las nubes, por lo que las borrascas acostumbran a ocasionar precipitaciones.
  • El aire frío es más denso y pesado que el cálido, por lo que tiende a descender.
El aire frío origina áreas de altas presiones, que se denoniman también anticiclones. El aire descendente es más seco, por lo que los anticiclones suelen ocasionar cielos despejados y tiempo seco.

La presión atmosférica se mide con el barómetro y se expresa en milibares. La presión normal a nivel del mar es de 1.013 milibares y es el límite entre las altas y bajas presiones.




Su velocidad se calcula en función de los juntas o separadas que estén las isobaras en el mapa. Cuanto más juntas estén las isobaras, más fuerza tendrá el viento y cuanto más separadas, menos.

En general, en la zona ecuatorial de la Tierra y en las zonas templadas dominan las bajas presiones, mientras que en la zonas tropicales y en las zonas polares se registran las altas presiones.
Los anticiclones (A altas presiones) dibujan isobaras más o menos concéntricas con valores máximos en su centro, mientras que en las borrascas (B bajas presiones) las isobaras se disponen con valores mínimos en su centro. El viento sopla con mayor intensidad allí donde las isóbaras están más juntas.
Las isobaras de un mapa meteorológico dan información acerca de la fuerza del viento y la dirección de este en una zona determinada.

USO DEL VIENTO en la antigüedad

El viento, entendido como energía, desempeña un papel importante en los mitos de las primeras civilizaciones. En estas leyendas, desde la civilización sumeria, a la romana, el viento representaba a una fuerza con un rol preponderante dentro de la sociedad. Según como esté configurada la civilización, política, económica o socialmente, así desarrollan el aprovechamiento energético.



Las culturas más antiguas aprovechaban su fuerza para desplazarse, mediante el uso de las velas en los barcos. De todos es sabido, la importancia del comercio en las culturas sumerias y egipcias, una actividad que tuvo su gran apogeo en el comercio fluvial, que se desenvolvía en el curso de los ríos Tigris, Éufrates y Nilo.

La civilización griega asociaba el viento, así como los otros elementos que dieron origen al mundo, fuego y agua, al uso de los dioses. Sus leyendas consideraban que las fuerzas de la naturaleza no debían de estar dominadas por los hombres. De ahí el desinterés por las aplicaciones tecnológicas, a pesar del gran desarrollo científico y filosófico de la civilización helena.

Hay que esperar al cambio de una economía de subsistencia a otra mercantilista y al fin de la esclavitud para que la sociedad, que necesita mano de obra, se implique en el proceso tecnológico e imponga las condiciones para usar las máquinas de potencia. Aún así, todavía es pronto para que los molinos de viento vean la luz.

Su inmediato precedente son los molinos hidráulicos, cuya existencia documenta Antipatro de Salónica en el siglo I A.C., al hablar de las ruedas hidráulicas. Estos ingenios, muy populares, en los pueblos del norte de Italia eran una adecuación de la rueda persa saqiya, que contaba con un eje horizontal. A pesar de que Vitrubio, los cita en su obra Diez libros de arquitectura, realizada en el año 25 D.C., los romanos no los utilizaron con demasiada frecuencia. Ello se debía a la abundancia de la mano de obra esclava, que suplía a las aplicaciones técnicas y a las fuentes de energía. La desaparición de la esclavitud, hizo que los molinos hidráulicos comenzaran a utilizarse en los siglos IV y V.

Este desconocimiento de la cultura occidental contrasta con los ingenios impulsados por el viento, que hicieron su aparición en las culturas orientales. En Mongolia utilizaban las ruedas de oraciones y su objetivo era producir sonidos rituales durante las celebraciones religiosas. Estos mecanismos, que poseían un eje vertical, se difundieron por Persia y China, con toda probabilidad, durante el siglo II A.C.

Los sistemas utilizados por los persas, según explica Lyhn White, tienen gran parecido a las ruedas de oraciones de Mongolia. Se cree que Persia al poseer territorios muy ventosos, es el lugar de oriente donde se desarrollan los conocimientos sobre el viento. Pero aún así y debido al comportamiento irregular del viento, a la intensidad y la dirección, así como la necesidad de aplicar la presión en las palas del molino hace que haya que esperar unos siglos para que los científicos puedan desarrollar los primeros molinos de viento.
La escuela de Alejandría, en concreto Herón, siglo II D.C., crea una máquina neumática conocida como el Auneriom, que giraba impulsada por la fuerza del viento, y que debía su movimiento a un rotor de eje horizontal, parecidos a los molinos mediterráneos y, en general, a los europeos.
Este precedente es el más antiguo encontrado en la historia de la humanidad, pero hay que esperar otros siete siglos más para encontrar molinos de viento en pleno funcionamiento. Vuelve la cultura oriental a adelantarse a la occidental, no en vano es la cuna de las civilizaciones, y es en el siglo IX, cuando los hermanos Banu Musa, en el año 850, citan a los molinos en el Libro de los ingenios mecánicos.

También los geógrafos árabes Al-Tabri y Al-Masudi mencionan que los molinos son utilizados con una doble función, como molinos harineros y como molinos de agua. El mecanismo de estos molinos constaba de un eje vertical, al igual que los molinos hidráulicos usados en Italia. Los autores árabes explican que comenzaron a construir molinos, gracias a las explicaciones que traían los esclavos de Oriente. La importancia del invento y la utilización por parte de los árabes, hace que sean ellos, los introductores del invento en España.
El molino persa tenía un funcionamiento muy sencillo, según la descripción hecha en el siglo XIII, por el cosmógrafo Al-Dimasqi. El aparato tenía una torre de mampostería con una pared frontal, que dirigía el viento sobre las palas rotoras y gracias a un sistema de compuertas, permitía la entrada del aire. El rotor disponía de seis palas de madera, unidas a un eje central, cuya separación variaba según unas cuñas.

Los ingenieros islámicos también son los creadores de los molinos de eje horizontal por la necesidad de adaptar las máquinas de eje vertical al bombeo del agua, debido a que este sistema no necesita variar la fuerza motriz con engranajes. Estos molinos a vela siguen la estela de las conquistas que realiza el Islam, por todo el Mediterráneo, y por el Este hasta la india y la China. Su principal ocupación era moler la caña de azúcar.

Pero las culturas islámicas no son las únicas que conocen los molinos, parece ser, que en los chinos, en el año 1655, según documenta Wowles, utilizaban unos molinos de viento, con ejes verticales, que se parecen a los hidráulicos. Algunos historiadores sostienen, entre ellos el español Julio Caro Baroja, que estos aparatos, que reciben el nombre de panémonas y se usaban para bombear el agua en las salinas, son el precedente de los molinos persas.-



ENERGÍA EÓLICA



Cuando se habla de Energía Eólica se está haciendo referencia a aquella energía contenida en el viento, pues las masas de aire al moverse contienen energía cinética (aquella asociada a los cuerpos en movimiento), las cuales al chocar con otros cuerpos aplican sobre ellos una fuerza. Por eso cuando nos enfrentamos a una ráfaga de viento sentimos que algo nos empuja.

La energía eólica, que no contamina el medio ambiente con gases ni agrava el efecto invernadero, es una valiosa alternativa frente a los combustibles no renovables como el petróleo. Otra característica de la energía producida por el viento es su infinita disponibilidad en función lineal a la superficie expuesta a su incidencia. 

La forma de aprovechamiento consiste en transformar la energía eólica en energía mecánica. La energía del viento se ha utilizado esencialmente en molinos de viento, los cuales han permitido principalmente el bombeo de agua, la trilla y molienda de productos agrícolas y en los últimos años, generación de electricidad.

El aprovechamiento de la energía eólica constituye una alternativa muy importante y competitiva, por lo que es muchísima en la actualidad su aplicación a nivel mundial, como parque generador eléctrico, mediante la ejecución de centrales o usinas eólicas.
De esta manera se reemplazan los combustibles tradicionales, sin originar contaminación ni cambios ecológicos en el ambiente.
Las ventajas de la energía eólica son irresistibles: protección al medio ambiente, crecimiento económico, creación de puestos de trabajo, diversidad en el suministro de energía, rápido despliegue, innovación y transferencia de tecnología. El combustible es gratis, abundante e inagotable. No obstante, estas ventajas están generalmente aún sin explotar. La mayoría de las decisiones sobre energía que se toman actualmente no contemplan la energía eólica, tropezándose con muchos obstáculos y barreras. es una fuente energética mundial, accesible, común y viable que es capaz de sustituir a los combustibles fósiles.






DUST IN THE WIND
KANSAS




I CLOSE MY EYES
ONLY FOR A MOMENT AND THE MOMENTS GONE
ALL MY DREAMS
PASS BEFORE MY EYES A CURIOSITY

DUST IN THE WIND
ALL THEY ARE IS DUST IN THE WIND
SAME OLD SONG
JUST A DROP OF WATER IN AN ENDLESS SEA

ALL WE DO
CRUMBLES TO THE GROUND, THOUGH WE REFUSED TO SEE


DUST IN THE WIND
ALL WE ARE IS DUST IN THE WIND


NOW DON´T HANG ON
NOTHING LASTS FOREVER BUT THE EARTH AND SKY

IT SLIPS AWAY
AND ALL YOUR MONEY WON´T ANOTHER MINUTE BUY
DUST IN THE WIND
ALL WE ARE IS DUST IN THE WIND
DUST IN THE WIND
EVERYTHING IS DUST IN THE WIND






5 comentarios:

Juan Nadie dijo...

Como siempre, una entrada completita, aunque yo añadiría unos pocos nombres más del dios Eolo: Cierzo, Gallego, Ábrego, Solano, Tramontana... et alia

Vale, ya veo que el cierzo y la tramontana sí están, sorry.

marian dijo...

No te puedes imaginar (bueno, tú sí) la de vientos que andan soplando por el mundo, la lista sería larga, para que nos dé un Siroco, leyéndola:)

Sirgatopardo dijo...

Pues a mí el viento sur por éstas latitudes me pone loco, igual que el Phön a los tiroleses.

marian dijo...

Venga, ya está el Ábrego puesto, no sea que os dé un mal aire:)

Juan Nadie dijo...

En Reinosa el Ábrego siempre está puesto, ¿no, Gatopardo?