martes, 2 de diciembre de 2014

DE MANHATTAN A MANNAHATTA




La población originaria de los Estados Unidos, en el momento de la invasión de los europeos, se componía de cientos de tribus diferentes. Existían en torno a diez millones de habitantes, que constituían unos trescientos grupos en diversos grados de desarrollo y múltiples hibridaciones culturales, una diversidad que se aprecia en la existencia de doce ramas lingüísticas y numerosas lenguas y dialectos derivados. Estaban agrupados en diferentes naciones o confederaciones, que a su vez se dividían en tribus y clanes que no siempre se llevaban bien entre ellas, de hecho, algunas de las tribus estaban constantemente en guerra. Poseían una cultura muy rica, variada y espiritual fundamentada en la armonía y el respeto a la naturaleza, cuyo equilibrio fue roto por los invasores. Cuando los primeros exploradores Europeos llegaron a estas tierras, las tribus nativas americanas poblaban todas la áreas del continente americano. Los primeros asentamientos fueron encontrados en Delaware, y los Iroquois, Mohawk, Algonquin y otras tribus en la parte noreste de los Estados Unidos.

En el momento de la colonización europea en los siglos XVI y XVII. Los indígenas americanos que existían en la zona de lo que hoy son los estados de New Jersey, Pensilvania oriental, el sur del estado de Nueva York, especialmente el valle de Hudson y el puerto de New York, y la costa norte del estado de Delaware, era las tribu de los llamados Lenni Lepape que significa “verdaderos hombres” o "pueblos originarios" o como los conocían los colonos ingleses del valle del Río Delaware, indios Delaware. Formaban parte del grupo algonquino, que vivían en la zona conocida como Lenapehoking (tierra de los Lenapes), entre Delaware y el Rio Hudson, sustentándose de la caza y de la agricultura.

En su idioma, ellos llamaban a su patria Scheyischbi, que significa “el lugar que se aproxima al océano”. Entre la familia de tribus norteamericanas de los angloquinos, los Lenape eran considerados como “los abuelos”, lo que nos indica de su antigüedad. Esta distinción les otorgaba en los consejos tribales un lugar de respeto como una de las principales tribus. Los lenape  vivían en poblados que no solían superar unos centenares de habitantes y  dispuestos en distintos lugares de su territorio, trasladándose durante el año a cada uno de ellos  en función de la caza o cuando agotaban una zona de cultivo.


Paisaje que pudo contemplar Henry Hudson cuando llegó a la isla de Manhattan en 1609.  National Geographic

de Mannahatta a Manhattan





Manhattan. National Geographic



Verrazzano-Narrows Bridge
 Puente colgante que conecta el barrio Fort Hamilton en Brooklyn con el barrio de Nueva York en Staten Island 




                                                                                               

En 1524, el florentino Giovanni de Verrazzano exploró la Upper Bay, que definió como "un lago muy bello"  Fue el primer navegante europeo que se sabe entró en la Bahía de Nueva York.

Un año después, Esteban Gómez (Estêvão Gomes), un topógrafo, cartógrafo y explorador portugués que navegó al servicio de la Corona Española en la flota de Fernando de Magallanes, remontó el río Hudson en una expedición que se extendía por la costa oriental de Norteamérica, desde Nueva Escocia hasta la Florida. Como resultado de su expedición, el mapamundi realizado por Diego Ribero (Diogo Ribeiro) en 1529 describe dicha costa casi a la perfección.






Nueva York fue fundada con el nombre de Nueva Amsterdam (Nieuw Amsterdam) por los holandeses, que fueron los primeros europeos en llegar a esta parte del continente americano. No fue tarea fácil la instauración, un alto coste económico y humano fue necesario para su levantamiento.










HARD TIMES IN NEW YORK
BOB DYLAN
















                                                     
Buscando un paso marítimo hacia Asia por el Noroeste, el explorador inglés Henry Hudson llega a la bahía de Nueva York en 1609 y remonta el Hudson, que hasta mediados del siglo XVII, tenía el nombre neerlandés de Noort Rivier (río del Norte). A su vuelta a Europa, comenta el gran potencial del lugar, especialmente por los castores y nutrias, cuya piel constituía una mercancía muy apreciada, particularmente para producir sombreros impermeables.

Durante los quince primeros años, la isla de Manhattan es poco utilizada por los colonos de los Nuevos Países Bajos (Nieuw Nederland). Los exploradores prefieren adentrarse en los bosques, abundantes en caza, donde practican el trueque de productos europeos baratos por pieles traídas por los cazadores indios.

En 1624, las primeras familias de colonos, llamadas para administrar los puestos de comercio, son enviadas en su mayoría río arriba al valle del Hudson. Mientras tanto, en la isla de Manhattan, se encuentran unas plantaciones y un poco de ganadería.

En 1625, bajo la amenaza creciente de un ataque proveniente de otras potencias coloniales, los dirigentes de la Compañía Neerlandesa de las Indias Occidentales decidieron proteger la desembocadura del río Hudson, y reagrupar las actividades de los puestos comerciales en un recinto fortificado.
El director de la compañía, Willem Verhulst, y el ingeniero Cryn Fredericks escogieron un sitio apropiado al sur de la isla, el emplazamiento actual de un edificio de las aduanas americanas (Alexander Hamilton U.S. Custom House), cerca de Battery Park.

Willem Verhulst era un administrador impopular que trataba a los colonos como simples empleados y no administraba correctamente las finanzas de la colonia. En 1626, es reemplazado por Pierre Minuit, quien procede a concentrar un buen número de colonos dispersos por diferentes territorios norteamericanos en lo que se llamó Nueva Holanda. Es Minuit quien trae a Nueva Amsterdam a los primeros esclavos africanos.

                                                                                                                            
El 24 de mayo del año 1626, Peter Minuit, que hasta 1633 fue director general de la colonia holandesa de Nueva Holanda y fundador de la colonia sueca de Nueva Suecia en 1638, compró el territorio que hoy ocupa la isla de Manhattan a los indios Canarsie, de la tribu Lenape, intercambiando objetos por un valor de 60 guilders, que según un historiador neoyorquino equivalían a 24 dólares, pero que en realidad se acercan más a los mil dólares.
Suficiente dinero en la época como para comprar 2.400 barriles de cerveza. 
Los objetos intercambiados iban desde ollas hasta piezas de ropa, pasando por cadenas de hierro, hachas e incluso arpas de boca, un instrumento musical que usaban los chamanes.
Minuit estaba convencido de que había hecho un negocio redondo, pero en realidad había comprado la isla a los indios equivocados, porque los verdaderos dueños de esa tierra eran una tribu perteneciente a los Algonquines y no a los Lenape, que estaban por allí formando parte de una partida de caza. 

(Una de las versiones, pues hay unas cuantas más)




El acceso al comercio de pieles de castor, daba lugar a una empresa privada enfocada en formar alianzas y hacer comercio con las tribus indígenas. La desembocadura del río Hudson daba acceso fácil al océano mientras aseguraba un acceso continuo a los bosques más al norte sin tener problemas de aguas congeladas.

La ciudad comercial era propiedad de la Dutch West India Company y se caracterizaba por tener una gran cantidad de tabernas de marineros y de lenguas distintas.
La administración de la colonia se confió a responsables que no en todo momento supieron llevar la tarea a buen puerto. Desde el primer momento, los gobernadores de Nueva Amsterdam demostraron más talento para enriquecerse que para administrar. Mientras, los colonos se quejaban de las tacañas raciones y de las rústicas cabañas de troncos de la Dutch West India Company. Por su parte, el gobernador Willem Kieft había provocado tantos problemas con los nativos americanos que estos sellaron una alianza para combatir a los agresivos europeos.

Sus colonos se rebelaron contra el tiránico gobierno de la empresa. Fue la batalla judicial de unos pocos empleados por convertirse en ciudadanos de pleno derecho; su líder, Adriaen van der Donck, un joven abogado que quería un gobierno representativo para la colonia,  cruzó el Atlántico y presentó la demanda ante el gobierno holandés. Fue el primer abogado de la colonia holandesa de Nueva Holanda y uno de los líderes de la vida política de Nueva Amsterdam.

Impresionado por su nueva patria, Nueva Holanda, Van der Donck escribió descripciones detalladas del territorio, la flora, la fauna, las vías fluviales, la topografía y el clima. Van der Donck utilizó este conocimiento para promocionar activamente la inmigración a la colonia, y publicó numerosos tratados, incluido su influyente "Descripción de Nueva Holanda".

En 1647, la empresa impuso un director general más firme: el adusto militar Peter Stuyvesant. Ante él se alzó Van der Donck, que administraba el latifundio de un comerciante. Encabezó un consejo local y recopiló las quejas de los colonos. Con ellas, creó el documento más conocido de la colonia: , la "Reconvención de los Nuevos Países Bajos". Una queja formal de 83 páginas que presentó ante el Gobierno de La Haya en 1650 y que, con el tiempo, consolidaría la estructura de la colonia de Manhattan en el derecho holandés y conferiría a la ciudad de Nueva York una forma y un carácter únicos.

Cuando Peter Stuyvesant desembarcó con su pata de palo, con la intención de arreglar las cosas, la población se reducía a 700 personas y Kieft se había retirado para hacer recuento de sus ganancias conseguidas gracias a transacciones corruptas.

Peter Stuyvesant se dedicó a reconstruir la desmoralizada colonia con ahínco, e hizo construir una iglesia, una escuela, un molino, mercados, puentes, etc. Dispuso vigilancia nocturna, reparó el fuerte, excavó un canal que se encuentra bajo la actual Canal St y autorizó la construcción de un embarcadero municipal. La floreciente economía  del azúcar en el Caribe contribuyó a que en Nueva Amsterdam se empezase a traficar con esclavos, lo que en poco tiempo provocó que la fuerza de trabajo esclavizada ascendiera a un 20% de la población. La Dutch West India Company estimuló un fructífero intercambio entre las plantaciones de las islas y también ofreció privilegios para atraer a los mercaderes al puerto en crecimiento. Todo ello contribuyó, con el paso de los años, a ampliar la estabilidad social y las actividades económicas de los colonos. El comercio de pieles, tan importante en un primer momento, fue progresivamente suplantado por la exportación de productos alimentarios y tabaco.

Se construyeron numerosas edificaciones según la arquitectura tradicional holandesa, calles bien definidas y canales que recordaban a Amsterdam. La defensa de sus intereses llevó a que la colonia a convertirse en una auténtica fortificación. Para ello fue protegida por una sólida muralla que con el tiempo dio nombre a la calle “Wall Street”. En su origen, este fue el límite de la ciudad y actuó como línea de protección frente a los ataques de los indios o de los colonos de otros países como Inglaterra. Aunque también se barajan otras hipótesis, como que su verdadera función era la de impedir la huida de esclavos.



En 1652 los colonos holandeses construyeron un muro de madera y lodo para proteger el bajo Manhattan.
Cuando los británicos se apoderaron de Nueva Amsterdam
 demolieron el muro y construyeron una carretera asfaltada en su lugar.
 El nombre original holandés "Waal Straat" se convirtió en Wall Street.
Este es el origen de su nombre: la calle de la pared.
 A finales del siglo XVIII se convirtió en un mercado abierto para el intercambio de productos agropecuarios, 
mercancías y valores, cuyas transacciones se hacían en la calle.



Los administradores de la colonia instauraron además un sistema catastral, con el fin de controlar las edificaciones y ordenar el crecimiento urbano. Igualmente, se procuraron medios para que la comunicación y el transporte de mercancías entre el norte y el sur de la isla de Manhattan se realizase de la mejor manera posible.

El dinámico comercio de pieles, tabaco y madera abastecía de licor, armas, cafeteras y ropa a los residentes y a los nativos americanos. La prosperidad importaba más que la nacionalidad.


En 1664 finalizó el dominio holandés sobre Manhattan. La rivalidad marítima entre Inglaterra y Holanda se dio por terminada con la victoria de la primera y la colonia pasó a manos británicas, que la rebautizaron como New York en honor a Jacobo, duque de York, hermano del rey Carlos II de Inglaterra, Escocia e Irlanda.


Los neerlandeses la recuperaron brevemente en 1673 (rebautizándola como Nueva Orange) y la volvieron a ceder a Inglaterra en 1674 por los términos del Tratado de Westminster (cambiaron con los ingleses su Nueva Holanda por la pequeña isla de Run -Indonesia-, rica en nuez moscada, y Suriname, rico en bauxita y oro, un territorio de al norte de Brasil), renombrando los ingleses el asentamiento como New York. Con las colonias vecinas los ingleses constituyeron Nueva Inglaterra.

A lo largo del siglo XVIII los colonos ingleses se enfrentaron en numerosas ocasiones con los franceses por el control de Manhattan, guerras en las que los colonos lograron implicar para su causa a las tribus indias.

La inmigración y el desarrollo transformaron la ciudad, de tal forma que en 1835 Nueva York se convirtió en la ciudad más grande de Estados Unidos.

De la ocupación neerlandesa, han quedado algunos nombres de lugares neoyorquinos, derivados de ciudades holandesas, como Coney Island (Konijnen Eiland), Brooklyn (Breukelen), Harlem (Nieuw Haarlem), Flushing (Vlissingen), Broadway (Bridewej) y Staten Island (Staaten Eylandt).

La bahía de Gowanus obtiene su nombre de Owanus (Ohain, pueblo de Brabante valón). La bahía de Wallabout, en el norte de Brooklyn, quiere decir "bahía valona" en neerlandés (Waal bocht). El nombre de Hoboken, en Nueva Jersey, proviene de un municipio de Amberes en Flandes. Communipaw, en Jersey City, es la contracción de Community of Pauw.

Hay palabras de entonces que todavía forman parte de la tradición americana, como: Yankees (la mayoría de los holandeses en Nueva Amsterdam se llamaban Jan o Kees), Dollar (tras la vieja moneda holandesa ‘daalder’). 

La huella principal que los habitantes nativos dejaron en el Nueva York moderno es el nombre de la isla de Manhattan, derivado directamente del término Mannahatta que se puede traducir como «La pequeña isla»







Después de la Guerra de Secesión, la inmigración se intensificó y para controlarla, se construyó en 1890 un centro de tránsito en la isla Ellis, cercana a la isla de la Libertad donde actualmente se encuentra la Estatua de la Libertad. Esta se convirtió en la principal aduana de la ciudad y en donde a los pasajeros se les inspeccionaba legal y médicamente para permitirles o no el desembarco en la ciudad. Se calcula que unos 12 millones de personas pasaron por aquí desde 1892 hasta su cierre en 1954.

Son años de crecimiento y también de enfermedades causadas por el hacinamiento de la población. Los neoyorkinos más pobres vivían hacinados en departamentos estrechos e insalubres denominados tenements. Se producen epidemias de cólera en 1832 y 1866 y por ello en 1879 se promulga una ley que obliga a que todas las casas en la ciudad tengan al menos una ventana que permita mejorar la ventilación y la entrada de luz.

A mediados del siglo XIX, más de la mitad de los neoyorkinos habían nacido en el extranjero. Flujos de población procedentes de Europa fueron llegando y se estima que entre 1820 y 1890 más de diez millones de inmigrantes se instalaron o pasaron por Nueva York.

Los inmigrantes más numerosos eran alemanes e irlandeses: los primeros abandonaron su país tras las Revoluciones de 1848 y los segundos a causa de la Gran Hambruna Irlandesa de la patata.
Con la fuerte inmigración que estaba sufriendo Nueva York, surgieron barrios étnicos en Manhattan.

A principios del siglo XX, el 60% de los adolescentes, es decir, seis de cada diez, tenían al menos un padre de origen extranjero. Manhattan era así un verdadero mosaico de culturas.
     
Más tarde llegaron los judíos huyendo del régimen nazi y se instalaron en gran cantidad en Washington Heights. Los afroamericanos del sur del país se reagruparon en los barrios de Harlem o de Bedford-Stuyvesant que se fueron convirtiendo en los años 1940 en una especie de guetos.

En los primeros años de la década de 1920, 40.000 casas de vecindad fueron destruidas y en su lugar se construyeron alojamientos sociales para dar cabida a la gran cantidad de inmigrantes. La Gran Depresión echó a la calle a miles de neoyorkinos, algunos de los cuales habitaron en los refugios de Central Park.


Con el desarrollo industrial de Nueva York, el número de obreros aumentó fuertemente, pasando de 30.000 en 1840 a 220.000 cuarenta años más tarde.




SIMON AND GARFUNKEL
AMERICA


El siglo XIX se caracterizó por un rápido crecimiento de Manhattan, lo que impuso el establecimiento de nuevas reglas en materia de habilitación urbana. De esta manera, en 1811, el Commissioners' Plan fue adoptado por las autoridades administrativas de la ciudad. 

El Commissioners Plan no tenía en cuenta la construcción de Central Park, sin embargo, entre 1821 y 1855, Manhattan cuadruplicó su población. Como la ciudad se había ampliado, la gente tenía pocos espacios abiertos donde acudir. La opinión pública fue pidiendo la creación de un lugar elegante para la conducción al aire libre, como el Bosque de Boulogne en París o el Hyde Park de Londres, fue el motivo por el que muchos neoyorquinos influyentes apoyaron la idea, y en 1853 la legislatura del Estado de Nueva York dio 2,8 km², el área situada entre las calles 59 y 106, para la creación del parque.


Fotografía de Jason Hawkes







NUEVA YORK 



Manhattan es uno de los cinco boroughs (distritos) de Nueva York. Se divide en tres sectores principales, la parte "baja" (downtown) -en el sur-, la parte "media" (midtown) -en el centro- y la parte "alta" (uptown) -en el norte-.

En el Norte nos encontramos con Upper Manhattan para las zonas más arriba de la 96, y con el Uptown que van desde la 59 hasta la 96. En el Medio tenemos Midtown que va desde la 34 hasta la 59. La zona del bajo Manhattan tiene Dowtown Manhattan desde la calle 14 hasta Chambers y Lower Manhattan sería toda la parte de más abajo de Chambers Street.

Tanto Norte como Medio Manhattan tienen su parte este y su parte oeste. Todas las avenidas y calles al oeste de la quinta avenida es West y las que están al este de la quinta son East.


MANHATTAN 

                            
















Manhattan es una isla alargada delimitada por los ríos Hudson (al oeste), East (al este) y Harlem (al norte). Las dimensiones de la isla son 21,7 kilómetros de longitud por 3,7 kilómetros de anchura.

La calle más importante de Manhattan es la Quinta Avenida, que la divide  en dos partes: este y oeste.
A excepción de la parte sur de la isla (Lower Manhattan o Bajo Manhattan, al sur de la calle 14) todo el desarrollo urbanístico de Manhattan es una cuadrícula. Las avenidas cruzan la isla de Norte a Sur y las calles lo hacen de Este a Oeste. Excepto Broadway, que recorre Manhattan de norte a sur de forma oblicua. Las calles cortan Manhattan de este a oeste y sus números ascienden de sur a norte. Todas las calles están divididas en dos partes: este (East) y oeste (West) en función de su ubicación respecto a la Quinta Avenida.

Los cruces de Broadway con las diferentes avenidas dan lugar a conocidas plazas, siendo la más importante Times Square.




Precisamente en uno de esos cruces se encuentra uno de los primeros rascacielos de Manhattan, el edificio Flatiron (1902)
El Flatiron se encuentra en una manzana triangular, limitada al sur por la Calle 22, al oeste por la Quinta Avenida y al este por Broadway. Estas dos últimas calles confluyen delante del edificio con la Calle 23, a la altura de Madison Square. 



El Flatiron visto desde el Empire State


Antes de que existieran rascacielos con estructura de acero, había grandes edificios de hierro forjado que suponían un avance en la tecnología constructiva pero que se inspiraban en estilos arquitectónicos del pasado. Al principio, las paredes de carga exteriores hechas de ladrillo se recubrían con planchas de hierro. Más adelante, los edificios se construyeron a modo de jaulas primitivas con una estructura y columnas interiores de hierro.

El Haughwout Building, un inmueble de estilo veneciano construido en 1856 con hierro forjado, tiene el primer ascensor para personas que se instaló en EE UU.

Se empezaron a edificar rascacielos después de que Elisha Otis perfeccionase el ascensor en 1853 y que, en 1885, William Le Baron  Jenney inventara la construcción con estructuras de acero en Chicago.





















El primer edificio considerado rascacielos fue el Home Insurance Building (1885) construido en Chicago con acero estructural. Fue demolido en 1931 para construir el Field Building (LaSalle National Bank Building). El Home Insurance Building no sería considerado rascacielos en la actualidad, ya que contaba con tan solo 42m de altura. Según los estándares actuales, el primer rascacielos sería el Park Row Building construido en 1899  en Nueva York con una altura de 119,2m (30 plantas).

El Tower Building (1888-1889) es considerado como el primer auténtico rascacielos de Nueva York. El Tower estaba ubicado en el número 50 de Broadway. Con 11 pisos, fue el primer edificio civil en la ciudad en construirse con una estructura interna de acero y en rebasar los 50 metros de alto. Por su altura,   este edificio fue motivo de controversia, ya que los vecinos temían que el edificio se desplomara ante los fuertes vientos que soplaban en la ciudad. Su arquitecto Bradford Gilbert refutó esta idea al instalarse en el último piso. Debido a la especulación inmobiliaria, este edificio fue demolido en 1914 para construir un rascacielos más elevado.


New York World (World Building) Edificio Pulitzer

Fue el segundo rascacielos en construirse en Manhattan, pero en diciembre de 1890 el World Building, construido por George B. Post, para la empresa periodística de Joseph Pulitzer, con 20 pisos y con 95 metros de alto, no solo fue el edificio de oficinas más alto de su tiempo, sino que inauguró un estilo que hasta la fecha caracteriza a los rascacielos de esta ciudad: el gusto por lo espectacular.

El rascacielos se construyó apenas un año después de la conclusión del Tower Building  y se convirtió en el eje central de un distrito de negocios enclavado frente al City Hall, llamado Newspaper Row, un sitio donde las grandes medios impresos de la época construyeron edificios cada vez más altos, en un afán de competencia férrea. Y no es para menos, pues se trataba de los diarios de mayor tirada de la ciudad, y quizá de Estados Unidos: el New York World Herald de Joseph Pullitzer, el New York Tribune de William Randolph Hearst, y finalmente el prestigioso New York Times. Estos medios de comunicación fueron los protagonistas de la época de oro de la prensa amarilla, sedienta de escándalos políticos y de corrupción y su ejército de Muckcrackers dispuestos a todo para lograr la nota sensacionalista.

Cada uno de los periódicos construyó su cuartel general en un ambiente de competencia. Es una costumbre americana: la gran empresa siempre quiere tener en mejor y el más alto edificio de su tiempo. Esta carrera en Newspapers Row comenzó en 1875 cuando el Tribune construyó su edificio de ladrillo de 11 pisos de alto y 65 metros. El edificio con su torre en forma de campanario dominó la zona durante los siguientes 15 años. 

Sin embargo, no fue hasta mediados de la década de 1880 cuando comenzaron a proliferar edificios de hasta 10 pisos de alto en los alrededores de la torre del Tribune, muchos de esos edificios destinados a oficinas de periódicos y revistas. En 1889, se inaugura el nuevo edificio del New York Times con 12 pisos y 55 metros de alto, un gran rival para el Tribune.

Pero en ese año se inician las obras de construcción del World Building. Joseph Pullitzer concibió la idea de construir un nuevo edificio para su periódico que fuera más espectacular que la torre de la empresa de Hearst, así que comisonó al arquitecto George B. Post para el diseño y construcción de su edificio de oficinas. 

Tribune Building Demolition, 1965
Collection of  Pace University Archives.
Así finalmente nos encontramos en diciembre de 1890, fecha de la conclusión del edificio de 20 pisos y 309 pies de alto, cuyo remate constituía una cúpula de estilo renancentista, en la que quizá Post tuvo como modelo la cúpula de la Basílica de San Pedro de la Ciudad del Vaticano.

El estilo arquitectónico del World Building era muy tosco, debido a que no había un estilo que pudiera identificarse y aplicarse a un rascacielos, pero imitaba en los elementos de la fachada y la cúpula a los palacios señoriales del Quatroccento italiano. A partir de este edificio la manera de construir rascacielos en Nueva York tomaría un rumbo muy distinto a lo que se estaba diseñando en Chicago con su escuela de arquitectura, en esos mismos años.

El edificio fue demolido en 1955 para darle espacio a los accesos para automóviles al Puente de Brooklyn.

Fuente: Skyscraper Museum. New York. 








Con la proliferación de las sedes centrales de empresas y la falta de espacio en Manhattan, la arquitectura del sur de la isla se fue haciendo  más y más vertical.




One Times Square
(1904)
También conocido como:
1475 Broadway
 New York Times Building
 New York Times Tower
Times Tower


La torre fue construida originalmente para servir como sede de los locales del periódico  The New York Times (que también da nombre a la zona en su conjunto, conocido como Times Square ); Sin embargo, el Times solo se quedó en el edificio 10 años, antes de trasladarse a un nuevo edificio en 229 West 43rd Street .






En marzo de 1995, One Times Square fue vendida a la empresa de servicios financieros Lehman Brothers. Los nuevos propietarios consideraron que no sería rentable para albergar nuevos inquilinos de la torre debido al costo de la amplia renovación necesaria para hacerlo apto para los inquilinos.
En su lugar, decidieron comercializar la torre como un lugar para la publicidad  y capitalizar su lugar prominente dentro de la plaza.
En 1904 Nueva York se vivieron hechos importantes. Ese año comienza a circular la primer línea de metro de la ciudad y se inaugura el edificio del New York Times en el corazón de la Gran Manzana de entonces. El dueño del periódico, Adolph Ochs, quería atraer a los ciudadanos de Nueva York para que conocieran y admiraran su flamante edificio de 25 plantas. Se le ocurrió entonces un evento que cambiaría la costumbre de los festejos del Año Nuevo.






Hasta entonces, la noche del 31 de diciembre los neoyorquinos se acercaban a la plaza de la Iglesia de la Trinidad en la intersección de la avenida Broadway y Wall Street, en el sur de la isla. Allí esperaban la medianoche para estallar haciendo sonar latas llenas de guijarros. Pero en 1904 se organizó un espectáculo de fuegos artificiales desde el edificio Times que congregó nada menos que a 200.000 personas.  




                 
El éxito de su iniciativa motivó a Ochs a dar un paso más. En 1907 mandó construir una enorme bola de hierro y madera que adornó con 100 bombillas y la instaló sobre un mástil en el techo de su edificio. La noche del 31 de diciembre, frente a los asombrados asistentes que esperaban el ya acostumbrado espectáculo de fuegos artificiales, la bola comenzó a deslizarse hacia abajo por el mástil. Había nacido la “caída de la bola” que cada año siguen miles y miles de personas allí mismo, y millones por televisión desde todo el mundo.





 Paramount Building





Municipal Building






The Heckscher Building (1916)






American Surety Building  (1897)











Gillender Building (1897)





Astor Trust Company building 





St. Paul Building







SKYLINE PRINCIPIOS SIGLO XX









Metropolitan Life Tower,   también llamado Metropolitan Life Insurance Building









Edificio Woolworth (1913)
 Inspirado en el Parlamento británico.
 Fue el edificio más alto del mundo hasta 1930,
 cuando se construyó el 40 Wall Street y el Edificio Chrysler.












Singer Building (1913)




















Para 1929, Nueva York ya contaba con 188 edificios de más de 20 pisos.





En la década de 1930, los arquitectos se alejaron de la inspiración histórica y, siguiendo las exigencias de las nuevas leyes de planificación urbana, se dedicaron a crear edificios únicos de contrucción escalonada que decoraban con ornamentación muy original. 

El Chanin Building (1929) fue el primero en su estilo gracias a su silueta parecida a una tarta de cumpleaños.




La aguja de acero inoxidable Nirosta fue colocada en la cima del edificio 
una tarde de noviembre de 1929  haciendo del edificio Chrysler 
no solo el edificio más alto del mundo,
 sino también la estructura más alta,
 superando a la Torre Eiffel.
Altura del Vertex 61 metros.


En las tres primeras décadas del siglo XX Nueva York duplica su población al mismo tiempo que aumenta su riqueza hasta el crack bursátil de 1929, y comienzan a construirse grandes edificios . En 1930 se inauguraba el Edifico Chrysler con 77 plantas y 319 metros de altura, y apenas un año después el más celebre de todos ellos, el mítico Empire State , con 102 pisos y 443 metros de altura que le convertirían en el edificio más alto del mundo durante cuarenta años. A partir de los años 1930, la mayor parte de los rascacielos más altos del mundo fueron edificados en el estilo art decó, como el famoso edificio Chrysler o el icono neoyorkino Empire State.

Nueva York vivió la fiebre de los rascacielos durante los años veinte; estructuras monumentales que hicieron de la ciudad el símbolo del urbanismo y la prosperidad. 

Fue en 1928 cuando Chrysler encargó a William Van Alen la construcción del edificio ubicado en el 405 de la avenida Lexington y el cruce con la calle 42.
Los rascacielos fueron una lucha de egos, pues mostraban el poder de ciertas personas ante el mundo, un ostento similar al de los faraones de Egipto pero ubicado en el siglo XX, y Walter Chrysler quería su pirámide.

Chrysler quiso que el edificio fuera el más alto del mundo superando al Woolworth Building, pero tuvo que competir con otro edificio que había comenzado a construirse a principios de 1928 en el número 40 de Wall Street para el Banco de Manhattan, diseñado por Craig Severance, antiguo socio de Van Allen. El proyecto inicial del Banco de Manhattan constaba de 47 pisos, pero Van Allen anunció que el suyo tendría 68 plantas y mediría 270 metros de altura. Unas semanas más tarde el diseño del Banco de Manhattan había crecido hasta las 63 plantas y los 280 metros. Ante tal anuncio Van Allen tuvo que modificar la cúpula haciéndola crecer dándole su original y característica forma; el diseño de la misma, muy estilizada, tienen unas formas muy redondeadas que emulan a las llantas de automóviles. Con sus 319 metros (1.047 pies) fue el edificio más alto del mundo durante 11 meses, hasta que fue superado por el edificio Empire State en 1931.




En esa época, la muerte de los trabajadores en construcciones altas era constante; una “regla” era que, a partir del piso quince, moría una persona por cada piso que siguiera. El edificio Chrysler cuenta con 77 pisos, lo que hacía esperar la muerte de 62 empleados, pero gracias a las grandes medidas de seguridad no hubo un solo deceso. El edificio fue construido rápidamente, con un promedio de cuatro plantas a la semana. Se dice que en días despejados los trabajadores podían ver el avance de sus rivales, quienes se encontraban a seis kilómetros y medio de distancia.


















 Chrysler Building
1930


























Gárgolas de acero



En cada esquina del piso 61 un águila de acero vigila la ciudad.
Estas rapaces de metal son una réplica de los ornamentos que llevaban los automóviles Chrysler hacia el año 1929. Los adornos del piso 31 son una reproducción a las tapas de los radiadores. Todo el edificio es un homenaje a los coches de la compañía en aquella época, una pequeña joya del Art Deco. El edificio abrió sus puertas el 27 de mayo de 1930 y fue durante unos meses el más alto del mundo. El récord le duró medio año, cuando se terminó la construcción del Empire State. 





  Empire State Building

1931

El Edificio Empire State es un rascacielos Art Deco de 102 plantas  sobre la intersección de Quinta Avenida y la Calle 34 Oeste. Mantuvo el titulo mundial del edificio más alto del mundo durante más de cuarenta años hasta la construcción del World Trade Center en 1970.
El lugar actual del edificio fue Granja de John Thomson a finales del siglo XVIII. El bloque fue ocupado por el Hotel Waldorf-Astoria a finales del siglo XIX.

El edificio se eleva a 381 m en el piso 102, y su altura estructural total (incluyendo la antena de difusión) alcanza los 443 m.


























Skyline de Manhattan con las Torres Gemelas


























































432 Park AvenueSituado en Park Avenue 432 será la torre residencial más alta (426 metros) en el hemisferio occidental, una vez completada su construcción en 2015. 




*

Un neoyorquino del Bronx





















8 comentarios:

  1. Wow, Marian. Atónito es poco. Impresionante entrada. Tan completa. Integral es la palabra. Cuánto trabajo, buen gusto y síntesis. Un compendio de New York. Material de consulta, sin exagerar. Y tan bien escrito... Deliciosas Sophie y Rosemary, qué decir de Bobby, Simon and Garfunkel y Billy Joel. La proeza, además, de ni siquiera mencionar a Frank Sinatra o a Liza y el emblemático tema… Y esas melancólicas fotografías de Marilyn y Thelonious, son instantáneas que riman, y todas las demás, una mejor que la otra... Me pasó que cuando conocí Nueva York sentí que ya no podía vivir sin ella, que mi Buenos Aires querida seguiría siendo como mi mujer y que Nueva York sería desde ese momento como mi amante. Qué más? Ninguna exageración. Felicitaciones.

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  2. Muchas gracias, Carlos (por tus bonitas palabras:) Resumir Nueva York es bien difícil (en general, cualquier lugar), creo que haré alguna entrada más sobre ella, también de otros lugares. No he estado en Nueva York, pero ya me gustaría conocerla (in situ) Ojalá.

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  3. He estado un par de días sin ordenador y me desayuno ahora.

    ¡Qué bonito (e interminable .-))te ha quedado este post! Lo leeremos (y escucharemos) con tranquilidad.

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  4. Cuántos sois (más o menos) porque el local es pequeño...
    El "interminable" con redoble de sonrisa te ha quedado bonito también (lo veía venir:)

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  5. No me estraña que acabases agotada de NYC, yo continuaré mañana por motivos de supervicvencia.¡¡¡SOS!!!

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  6. La única canción que no conocía es la que canta Sofie Milman. Buena interpretación.

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  7. Yo tampoco la conocía. Es de las que vienen solas, que buscando otras... aparece por sorpresa.

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