miércoles, 31 de octubre de 2012

JOAN BAEZ & JACKSON BROWNE




Jackson Browne
Song for Adam




Though Adam was a friend of mine, I did not know him well
He was alone into his distance, he was deep into his well
I could guess what he was laughing at, but I couldn’t really tell
Now the stories told that Adam jumped, but I’m thinking that he fell

Together we went traveling, as we received the call
His destination India, and I had none at all
Oh, I still remember laughing with our backs against the wall
So free of fear, we never thought that one of us might fall

I sit before my only candle, but it’s so little light to find my way
Now the story unfolds before my candle
Which is shorter ev’ry hour, as it reaches for the day
But I feel just like a candle, in a way
I guess I’ll get there, but I wouldn’t say for sure

When we parted we were laughing still, as our good-byes were said
And I never heard from him again, as each our lives we lead
Except for once in someone else’s letter that I read
Until I heard the sudden word that a friend of mine was dead

I sit before my only candle, like a pilgrim sits beside the wave
Now this journey appears before my candle
As a song that’s growing fainter, the harder I play
That I fear before I end will fade away
I guess I’ll get there, but I wouldn’t say for sure

Though Adam was a friend of mine, I did not know him long
And when I stood myself beside him, I never thought I was as strong
Still it seems he stopped his singing in the middle of his song
Well I’m not the one to say I know, but I’m hoping he was wrong

I’m holding out my only candle, but it’s so little light to find my way
Now the story’s been laid beneath my candle
And it’s shorter ev’ry hour, as it reaches for the day
Yes, I feel just like a candle in a way
I hope I get there, but I’d never pray



JOAN BAEZ
500 MILES








If you miss the train I'm on, you will know that I am gone
You can hear the whistle blow a hundred miles,
a hundred miles, a hundred miles, a hundred miles, a hundred miles,
You can hear the whistle blow a hundred miles

Lord I'm one, Lord I'm two, Lord I'm three, Lord I'm four,
Lord I'm 500 miles from my home
500 miles, 500 miles, 500 miles, 500 miles
Lord I'm five hundred miles from my home

Not a shirt on my back, not a penny to my name
Lord I can't go a-home this a-way
This a-away, this a-way, this a-way, this a-way,
Lord I can't go a-home this a-way

If you miss the train I'm on you will know that I am gone
You can hear the whistle blow a hundred miles



*


Joan Baez -Fountain of Sorrow- Jackson Browne 







domingo, 28 de octubre de 2012

QUINO, JOAQUÍN SALVADOR LAVADO




QUINO, Joaquín Salvador Lavado,  hijo de inmigrantes españoles, andaluces, nace en la ciudad de Mendoza (Argentina) el 17 de julio de 1932, aunque en los registros oficiales conste nacido el 17 de agosto. Desde que nació le llamaron Quino para distinguirlo de su tío Joaquín Tejón, pintor y dibujante publicitario con quien a los 3 años descubre su vocación.

En 1954 empieza a publicar regularmente en Rico Tipo, a la que siguen Tía Vicenta y Dr. Merengue. Al poco, empieza a hacer dibujos publicitarios. Publica su primer libro recopilatorio, "Mundo Quino", en 1963, tras lo que le encargan unas páginas para una campaña de publicidad encubierta para la empresa de electrodomésticos Mansfield,2 para las que crea a Mafalda. La campaña no llegó a realizarse, por lo que la primera historia de Mafalda se publica en Leoplán, tras lo que pasó a publicarse regularmente en el semanario Primera Plana ya que el director del semanario era amigo de Quino. Entre 1965 y 1967 se publica en el posteriormente desaparecido diario El Mundo; pronto publica el primer libro recopilatorio, y empieza a editarse en Italia, España, Portugal y otros países.

Tras abandonar la tira de Mafalda el 25 de junio de 1973, según él mismo por agotársele las ideas, Quino se trasladó a Milán, desde donde continuó realizando las páginas de humor que nunca ha dejado de hacer.




Aunque Mafalda aparenta ser una tira más con protagonista infantil, sus contenidos suelen ser más cercanos y a la vez adultos que otras tiras similares. Destaca, por ejemplo, la preocupación de Mafalda por la política mundial, la obsesión de Manolito con el dinero, etc. A pesar de ello, estos personajes aún pueden ser vistos por los lectores como niños reales con padres reales, y no como "adultos en cuerpos de niño".

El humor de Quino es típicamente ácido e incluso cínico, ahondando con frecuencia en la miseria y el absurdo de la condición humana, sin límites de clase. Así, hace al lector enfrentarse a la burocracia, los errores de la autoridad, las instituciones inútiles, la estrechez de miras, etc. No duda así en usar sus viñetas para enviar mensajes de contenido social a sus lectores. Otro recurso típico es la reducción al absurdo de situaciones conocidas. Con frecuencia, los chistes buscan la sonrisa como medio de enfrentarse a la cruda realidad.

Este enfoque pesimista de la realidad no impide que sus historias estén llenas de ternura y muestren una honda simpatía por las inocentes víctimas de la vida (empleados, niños, amas de casa, pensionistas, oscuros artistas...), sin ocultar sus fallos y limitaciones. Pero incluso en sus caricaturas de jefes opresivos y burócratas sin sentimientos se atisba cierta simpatía, por ser a su vez víctimas de su propia estupidez.




MERCEDES SOSA
- SUEÑERO-








FELIPE




Fue el primer amigo de Mafalda, ya que vivían en el mismo edificio.

Es una persona muy imaginativa, tanto que muchas veces cree que sus sueños son reales. Gran admirador del Llanero Solitario. Es el polo opuesto, en varios aspectos, de Mafalda.

Soñador, tímido, perezoso y despistado. Posee amor por la justicia y un corazón enamoradizo. Felipe es una persona vulnerable, impresionable, pero con el carácter de una persona muy bondadosa y, a la vez, muy inteligente. Algunas veces es un romántico. Ve la vida de manera más sencilla que Mafalda, más como el niño que es.



MANOLITO

Su mundo gira alrededor de los negocios. Muchas veces ayuda a su padre en la tienda que tienen, por lo que continuamente mezcla actitudes de comerciante con sus amigos. La escuela es una de sus peores pesadillas. Manolito, aunque es el chico más centrado del grupo, no es conocido ni por su inteligencia ni por su delicadeza (Susanita lo llama Bestia, cosa que es la base de su enemistad).

Es el más ignorante del grupo (no es muy inteligente, más bien se lo podría definir como bruto),sin embargo, es de los más divertidos de la historieta. Aunque es poco dotado intelectualmente, lo compensa todo con su energía y trabajo. Es ambicioso (le interesa muchísimo el dinero). A veces, su materialismo hace que las reflexiones suyas giren en torno al mundo económico y mezcle actitudes de comerciante con sus compañeros. Sin embargo, a pesar de ello, cuenta con un buen corazón y le importan sus amistades; en una tira se lo escucha decir que "los negocios serán los negocios, pero los amigos son los amigos".



SUSANITA

Es una amiga de Mafalda (valora su amistad) cuyo mayor deseo en la vida es casarse con un hombre guapo y rico (nació para conquistar a su príncipe azul), tener muchos hijitos, ser de clase acomodada, y asumir el rol asociado a la clásica mujer doméstica. El destino del mundo "le importa un comino". Es una niña envidiosa, y no puede ver que Mafalda tenga algo (o sepa algo), que ella ya lo está deseando también. Es caprichosa, racista, algo rencorosa y muy platicadora, gran defecto, ya que muchas veces aburre a los demás.

Es el personaje más expresivo de la historieta. Es algo ignorante, aunque no se dé cuenta, porque rechaza todo aquello que no sea como ella lo piensa. Es muy egoísta (detesta compartir sus cosas), y excesivamente prejuiciosa. La realidad mundial y nacional y los movimientos de liberación de la mujer, que tanto preocupan a Mafalda, no le importan nada. Es chismosa a la máxima potencia (nada de lo que pasa en su vecindario ocurre sin que ella se entere) y busca pleitos de vocación, pero hay que destacar su especial concepto de la amistad. Es, también, una enamorada incurable.



GUILLE


Guille es el hermano pequeño de Mafalda. Protagoniza de continuo las típicas travesuras y desperfectos domésticos de los niños de primera infancia. Tiende a ser algo irreverente con sus padres, y es un contestatario (con todos) de primera clase. Guille le hace a Mafalda, con el tiempo, las preguntas que ésta había hecho en el pasado, dejando a su hermana sin respuestas y creando situaciones incómodas en público.


Es dueño de una pícara ternura. Es juguetón y travieso, por lo que constantemente molesta a Mafalda y a su mamá. Es un elemento de ternura en su relación con Mafalda, pero también de conflicto. No puede entretenerse sin ensuciarlo todo, logrando con ello enfurecer a Raquel (su mamá). Cuando no juega, se dedica a hacer payasadas esperando que los demás las compartan y disfruten, situación que nunca sucede. Por el resultado de sus divertimentos, casi siempre se encuentra sucio. Típico representante de la edad de la inocencia, en la que todo está por descubrirse, tiene una agilidad mental totalmente excepcional para su edad. Su necesidad de afecto y cariño son tan cómicamente expresados como las realizaciones desastrosas de sus fantasías en la casa. Sus reflexiones son en cierto modo parecidas a las de Miguelito pero con una inocencia más diáfana, sin ese toque oscuro que Quino le da a Miguelito. No sabe repartir muy bien las culpas pero se da cuenta de que hay algo equivocado en el mundo.  Es muy expresivo cuando llora.



MIGUELITO

Es el más chico (salvo Guille) de toda la pandilla, y también el más egocéntrico.


Se siente una persona muy importante, es ingenuo, y le gusta filosofar. Es un personaje muy trabajado y algo extraño. Miguelito es la mezcla de una muy elocuente inocencia con una excentricidad también encomiable. El humor en torno a Miguelito se basa en ocurrencias respecto a cosas del mundo que lo rodea, que ocasionan reacciones no menos cómicas en sus amigos.


Enérgico, histérico, depresivo y contundente, es un soñador, como Felipe, aunque algo más egoísta y mucho menos tímido. Tiene una inocencia a prueba de todo y vive reflexionando acerca de cuestiones sin importancia. El es el centro del mundo, y no hay quien le haga pensar lo contrario. Tiene un carácter filosófico más profundo que el de la propia Mafalda, haciéndose preguntas más complejas sobre aspectos alejados de la realidad. Sus reflexiones mayoritariamente se basan en tonterías y cosas de muy poca importancia, sin embargo hay casos en donde éstas son dignas de un sabio. Por momentos se cree principio y fin de las cosas.



LIBERTAD

Es muy inteligente y crítica. De carácter fuerte, es contestataria y ama la simpleza. Es una especie de Mafalda en frasco chico, aunque menos tolerante. Le pone nerviosa la gente complicada. Ella, asegura, es simple (aunque de "simple" no tiene nada). Su aspiracion en la vida es ser traductora de francés, al igual que su mamá. Algunas veces hace reflexionar con sus pensamientos y dichos. Representa a las utopías de la época.


Intelectual, crítica, solidaria e incisiva, Libertad es más agresiva que todos los demás del grupo y tiene muchas ideas muy claras, aunque un poco radicales. Es un poco más liberal que Mafalda. Su personalidad es incendiaria y proyecta ideas políticas en contra del sistema establecido abiertamente. Libertad intenta comportarse de una forma madura, pero a veces se somete a algunas actitudes propias de su edad, si bien, a diferencia de Mafalda, siente culpa por eso.




PADRES DE MAFALDA

Constantemente se ven acosados por las preguntas de su hija. Los dos son pasivos, limitados e incluso levemente fracasados. Hay momentos en que aparecen como algo inocentes y, quizá también, infantiles.
Ambos tienen un par de debilidades en común: sus hijos (Mafalda y Guille) y el Nervocalm (un calmante).

MADRE.-Es una jóven y típica ama de casa de los años '60, que vive un poco atormentada por el remordimiento de no haber terminado su carrera. Preocupada hasta la histeria por lo que pasa dentro de su microclima hogareño, se siente esclava de su casa. Cocina, lava, plancha, hace las compras, y padece el dilema diario de pensar qué va a hacer de comer. Aparentemente no maneja el auto. Dejó sus estudios para formar una familia (cosa que Mafalda le reprocha cada vez que puede); es por eso que, a veces, se siente condenada a vivir sin ilusiones propias. Sin embargo, no requiere complicaciones para ser feliz, y da lecciones de humildad y sacrificio a su pequeña hija inquieta por las adversidades del Mundo.


PADRE.-Es un típico empleado de oficina (trabaja en una compañía de seguros). Se la pasa haciendo cuentas para llegar a fin de mes, procurando en todo momento la mesura en el gasto familiar. Su otra gran preocupación es cuidar celosamente su auto (un Citroën). Es amante de las plantas de interior, por lo que las hormigas son su peor enemigo, sosteniendo una lucha en la cumbre. Confiado, cree en el mundo en el que vive, pero no comprende bien los avances y retos que plantean las nuevas generaciones. Las dudas que le plantea su hija con respecto a los males del Mundo lo ponen en entredicho en más de una ocasión.




































































MERCEDES SOSA
VIEJO CORAZÓN





 eras joven, fuerte, tierno
noble corazón
sin reservas para darte en el amor
lo mismo que yo

yo era amigo del camino
con luna o con sol
peregrino de mil sueños y en amor
lo mismo que vos

juntos nos vieron pasar
cerros, valles, piedras, luna y sol
siempre juntos por la huella
íbamos tú y yo

cafoneándome en el pecho
me dabas valor
si el cansancio me empezaba a doblegar
viejo corazón

ya te estás poniendo viejo
pobre corazón
te presiento ya sin ganas de seguir
lo mismo que yo

me ha cansado la huella larga
solo y sin amor
hoy ansío estarme quieto y descansar
lo mismo que vos

ya no nos verán pasar
cerros, valles, piedra luna y sol
somos dos viejos vencidos
pobre corazón

andaremos lo que falta
juntitos los dos
queda muy poco camino por andar
viejo corazón









domingo, 21 de octubre de 2012

DOS DE PESSOA











Autopsicografía

El poeta es un fingidor.
Finge tan completamente
Que hasta finge que es dolor
El dolor que de veras siente.

Y quienes leen lo que escribe,
Sienten, en el dolor leído,
No los dos que el poeta vive
Sino aquél que no han tenido.

Y así va por su camino,
Distrayendo a la razón,
Ese tren sin real destino
Que se llama corazón.

Fernando Pessoa 

(Versión de Santiago Kovadloff)

Autor: José Sobral de Almada Negreiros


Tengo tanto sentimiento...


Tengo tanto sentimiento
que es frecuente persuadirme
de que soy sentimental,
mas reconozco, al medirme,
que todo esto es pensamiento
que yo no sentí al final.

Tenemos, quienes vivimos,
una vida que es vivida
y otra vida que es pensada,
y la única en que existimos
es la que está dividida
entre la cierta y la errada.

Mas a cuál de verdadera
o errada el nombre conviene
nadie lo sabrá explicar;
y vivimos de manera
que la vida que uno tiene
es la que él se ha de pensar.


Fernando Pessoa

(Versión de Ángel Crespo)






Envidio –pero no sé si envidio– a aquellos de quienes se puede escribir una biografía, o que se pueden escribir la propia. En estas impresiones sin nexo, ni deseo de nexo, narro indiferentemente mi biografía sin hechos, mi historia sin vida. Son mis Confesiones y, si nada digo en ellas, es que no tengo nada que decir.
¿Qué tiene alguien que confesar que valga o que sirva? Lo que nos ha sucedido, o le ha sucedido a todo el mundo o solo a nosotros; en un caso, no es novedad, y en el otro no es cosa que se comprenda. Si escribo lo que siento es porque así disminuyo la fiebre de sentir. Lo que confieso no tiene importancia, pues nada tiene importancia. Hago paisajes con los que siento. Hago fiestas de las sensaciones. Comprendo bien a las bordadoras gracias a la amargura, y a las que hacen punto de media porque hay vida. Mi tía vieja hacía solitarios durante lo infinito de la jornada. Estas confesiones de sentir son solitarios míos. No los interpreto, como quien usase cartas para saber el destino. No los ausculto, porque en los solitarios las cartas no tienen propiamente valor. Me desenrollo como una madeja multicolor, o hago conmigo figuras de cordel, como las que se tejen entre los dedos estirados y se pasan de unos niños a otros. Sólo me preocupo de que el pulgar no estropee el lazo que le corresponde. Después, vuelvo la mano y la imagen resulta diferente. Y vuelvo a empezar.
Vivir es hacer punto de media con una intención de los demás.
Pero al hacerlo, el pensamiento es libre, y todos los príncipes encantados pueden pasear por sus parques entre zambullida y zambullida de la aguja de marfil de pico al revés. Punto de ganchillo de las cosas... Intervalo... Nada...
Por lo demás, ¿con qué puedo contar conmigo? Una acuidad horrible de las sensaciones, y la comprensión profunda de estar sintiendo... Una inteligencia aguda para destruirme, y un poder de ensueño ávidamente deseoso de entretenerme... Una voluntad muerta y una reflexión que la arrulla, como a un hijo vivo...
Sí, punto de ganchillo...
(Fragmento del "LIBRO DEL DESASOSIEGO")
Fernando Pessoa



THE INNER CHILD
ROSA CEDRÓN & MIKE OLDFIELD